Se acerca el nuevo curso académico y muchos son los jóvenes que se decantan por la opción de compartir piso. La subida de los precios del alquiler en las principales capitales españolas se ha convertido en un auténtico infierno para algunos. Además, las condiciones para encontrar el piso idóneo que reúna todas las características deseadas se vuelven cada vez más difíciles. Según Eurostat, los españoles son de los europeos que más tardan en independizarse, situándose en la media de 29,3 años.
Definir bien el presupuesto y saber cuáles son las condiciones primordiales que debe tener el inmueble en el que quieres vivir, han de ser cuestiones importantes antes de decidirte por un inmueble u otro. Existen muchos portales que te pueden ayudar a comparar y a elegir correctamente, pero a veces, esto no resulta suficiente. Siempre se ha hablado cuáles son los pisos ideales para el inquilino en base al precio, zona o prestaciones básicas pero, ¿qué deben tener en cuenta los propietarios a la hora de de ofertar un piso u otro? ¿Qué es lo que los estudiantes valoran y les hacen decidirse? Los estudiantes hablan y estos son los puntos que más valoran positivamente.
1. Con muebles, mejor
La mayoría de los inquilinos quieren que su piso esté amueblado porque “añadir gastos en la compra de muebles eleva el presupuesto”, declara Marta L., estudiante de un MBA que afirma que, “cambiar de vivienda de un año a otro nos llevaría a no saber qué hacer con estos muebles“. Los muebles más demandados son la cama y un armario, no siendo imprescindible un escritorio. “Un mobiliario funcional y sencillo es la mejor opción y algo en lo que creo que casi todos estamos de acuerdo”, revela Marta. Niels van Deuren, fundador de HousingAnywhere afirma que, “los inquilinos prefieren la conveniencia que implica no tener que comprar muebles nuevos y luego no tener el gasto extra que supone el envío de estos antes de mudarse”.
2. Todos conectados y equipados
Elena, propietaria de un piso en la zona de Tirso de Molina, declara que, “un buen frigorífico y una lavadora son esenciales porque sin ellos, no se puede vivir”. “El lavavajillas o el horno no se consideran necesarios aunque aquella vivienda que los contenga, siempre sumará puntos“, afirma Marta.
Por otra parte, hoy en día, el acceso a Internet se ha convertido en una necesidad básica. Según Mariano Kostelec, cofundador y director de Uniplaces, “la red Wifi es de las prestaciones más demandadas por los inquilinos“. Esto trasciende nacionalidades y sexos y se convierte así en un atractivo vital de cualquier piso. “No es muy frecuente que los pisos de estudiantes tengan el Internet incluido”, declara Marta. “Que la contratación de Internet esté incluida en el contrato, es algo a lo que se puede llegar por medio de un acuerdo”, afirma Elena en su papel de propietaria. Esto se debe quizás a que la Red se está convirtiendo en una necesidad básica de la que goza todo inmueble.
3. Pequeños detalles que importan mucho
Los utensilios de cocina son básicos. “No pedimos una vajilla de calidad y lujo, pero sí platos y vasos, que son necesarios si lo que buscas es un piso amueblado y equipado”, declara Carmen, estudiante de Logística que comparte piso desde que comenzó sus estudios. Que todas las zonas de la vivienda estén perfectamente equipadas con enchufes y una buena red eléctrica es un aspecto fundamental. “En las habitaciones, las cortinas y especialmente las persianas garantizan el descanso y, aunque una estancia no tenga mucha incidencia solar, son necesarias”, afirma Marta.
4. Previa información de la zona
“Al igual que en los pisos turísticos, un buen propietario debe informar al inquilino, y más si es estudiante, de las prestaciones que dispone en la zona de la vivienda”, afirma Carmen. El centro de salud más cercano, la biblioteca de la zona o los supermercados colindantes, pueden ser datos de interés para los inquilinos, que muchas veces no tienen claro dónde acudir. “Aunque Internet y el tiempo en la zona les llevará a saber dónde dirigirse, es esencial y cercano que como caseros estemos a disposición de las necesidades de los estudiantes porque ser propietario no debería únicamente significar cobrar una cuantía a final de mes”, sentencia Elena.
5. El tamaño de las habitaciones
Los estudiantes buscan habitaciones amplias, aunque en muchas ocasiones, los elevados precios hacen que se tengan que instalar en pisos de escasos metros cuadrados. “Depende de la confianza de con quien compartas piso pero para mí, lo normal es compartir gastos. Esto se traduce en que buscamos habitaciones que tengan prestaciones similares, aunque en ciudades como Madrid o Barcelona, esto se vuelve una búsqueda completamente laboriosa”, afirma Carmen. En el caso de que las habitaciones estén muy descompensadas, existen opciones como rotar cada cierto tiempo o pagar en base al nivel de la habitación. Es el propietario el que antes de alquilar debe acondicionar la vivienda para que estas se adapten a las necesidades básicas y el inmueble sea un lugar donde vivir, incluso hacer reforma para cambiar la distribución y hacerla más equitativa.
6. Calefacción y aire acondicionado
La climatización es un requisito indispensable en las estaciones extremas. Los estudiantes buscan preferiblemente un inmueble que se anuncie con ‘Calefacción central’ puesto que el precio irá incluido en el precio mensual. “A veces, la calefacción eléctrica o de gas natural puede aumentar considerablemente el precio de la factura”, afirma Marta. El aire acondicionado no es una prestación de la que gocen muchos pisos para estudiantes y algunos prefieren que no exista porque se elevará el gasto mensual. Los ventiladores se configuran así como la opción preferida para combatir el calor. Mejor si vienen de serie.
7. Reparaciones
En el contrato tienen que estar bien definidas las obligaciones de ambas partes. “En ocasiones, es común que los caseros decidan no hacerse cargo de repente de un desperfecto que por ley debería correr a su cuenta“, declara Carmen según su propia experiencia. Una buena relación entre el propietario y el inquilino es fundamental.
¿Qué gastos están dispuestos a pagar los estudiantes y cuáles deben correr a cuenta del propietario? Según Kostelec, “el 75% de las peticiones que hacen los inquilinos son de habitaciones con gastos incluidos“, un porcentaje bastante alto que en ocasiones puede chocar con la realidad. “Siempre hemos aceptado que los gastos como la luz o el agua corren a cuenta del inquilino aunque a veces, esto se puede pactar”, afirma Marta. “Los gastos de la comunidad de vecinos es algo que siempre debe asumir el propietario en los pisos alquilados a estudiantes”, declara Elena.
Van Deuren afirma que, “evidentemente, si las facturas están incluidas en el alquiler total, ¡ya es una cosa menos por la que preocuparse!”, aunque también considera que, “a veces hacer nuevos contratos de Internet y electricidad puede ser difícil si existe la barrera del idioma“, refiriéndose a estudiantes extranjeros que vienen de Erasmus a España.
8. Diferencias por sexo y nacionalidad
“Las chicas se fijan más en el mobiliario que los chicos, para los que el espacio y la amplitud ocupan una especial relevancia”, sentencia Elena. Según Kostelec, también existen diferencias en el tiempo, “las mujeres tienden a reservar las habitaciones con más anterioridad que los hombres y demandan más habitaciones con baños”. Como propietario hay que tener en cuenta estas diferencias tratando de ofrecer pisos lo más neutro posible con el fin de que la casa se adaptarte fácilmente a las demandas de los inquilinos, sean del sexo que sean.
Los inquilinos foráneos no exigen las mismas prestaciones que los españoles. “Los extranjeros están dispuestos a pagar más porque muchos pisos les parecen una auténtica oportunidad en comparación con los precios que existen en sus países, aunque resulta más seguro para un propietario alquilar a un español por el mero hecho de que los extranjeros suelen estar de paso“, afirma Elena.
Según Kostelec, “los estudiantes que provienen de países anglosajones le dan mucha importancia al centro de las ciudades, mientras que el resto de clientes europeos prefieren que la zona esté bien comunicada y que haya supermercados cerca”. Respecto a los estudiantes internacionales, Kostelec afirma que “son los que más demandan los gastos incluidos, ya que no quieren lidiar con gestiones burocráticas”.
Por su parte, Van Deuren cree que, “la nacionalidad puede ser un indicador de la capacidad económica que la persona podría tener con respecto al presupuesto. La mayor diferencia que vemos es que los estudiantes de EE.UU. tienden a compartir la habitación más que los estudiantes europeos, que definitivamente buscan habitaciones privadas”.
9. Almacenaje sí, parking no
Muchos estudiantes viven fuera de sus ciudades, por lo que acarrean un gran número de pertenencias de un año a otro. “Necesitamos espacio en el que guardar cosas o para almacenar la ropa de otras temporadas”, afirma Marta. “El acceso a un trastero también es una opción que se valora positivamente”. El estudiante no suele disponer de vehículo propio, se mueve más en transporte público, por lo que el parking no es una prestación muy solicitada. El casero puede poner la plaza de garaje en alquiler de forma separada al piso, y así conseguir más ingresos.
10. Abiertos a la negociación
Una de las demandas más importantes que hacen los estudiantes es la de que los propietarios estén abiertos al diálogo. “Considero que alquilar es un contrato en el que las dos partes han de salir ganando siempre y en la que, como inquilinos, debemos cuidar la vivienda a la vez que el propietario ha de preocuparse para que su inmueble se conserve lo mejor posible”, asegura Marta. Escuchar y ser escuchado es la clave del éxito.
La entrada 10 recomendaciones que los estudiantes hacen a los propietarios que quieren alquilar se publicó primero en pisos Al día - pisos.com.